Las personas mayores que sufren pérdida de audición muchas más posibilidades de reducir su espacio de movilidad que las personas jóvenes, por eso la calidad de vida de estas personas es mucho más limitada.Sntomas de la ansiedad

Los efectos llamémosles colaterales de la pérdida auditiva no solo les limita la capacidad de comunicarse sino también influyen para que se puedan mantener activos y participar mucho más en actividades y trabajos.

Según un estudio realizado  entre 848 personas de ambos sexos, entre 75 a 90 años, que tiene pérdida auditiva tratan de reducir su movilidad a espacios muy cercanos y conocidos de su entorno, en comparación con personas que oyen normal.

La medición de la pérdida auditiva con simples audiometrías, no es suficiente para poder valorar como va a afectar en la vida diaria a las personas con pérdida auditiva, una persona con una vida social muy activa, una pérdida leve le puede afectar mucho en el desenvolvimiento diario; mientras que una persona más casera no le afectara tanto en su día a día.

La pérdida de audición puede acarrear varias causas que pueden condicionar nuestras vidas.

Las personas pueden tener distintas variaciones, no todas ellas responden de la misma manera, no obstante la mayoría de las personas con pérdida auditiva experimentan y sufren distintos problemas que pueden ser

sociales, físicos o psicológicos como resultado de esa pérdida de audición.

La pérdida AUDITIVA genera problemas, como vergüenza, falta de concentración, baja autoestima, incluso depresión; también dolores de cabeza, tensión muscular, estrés, incluso aumento de la presión arterial y tensión muscular, también puede provocar consecuencias sociales como el aislamiento y problemas en la comunicación.

En Europa la pérdida de audición tiene un coste cerca de 225 mil millones de € al año.

Según el grado de pérdida auditiva el coste por persona y año se sitúa entre 2000 y 11000 € año. En estas cifras no están incluido las pérdidas en recaudación de impuestos y los costes por desempleo o jubilación anticipada por causa precisamente de la perdida de auditiva.

Una hipoacusia no tratada a tiempo suele tener efectos psicológicos muy negativos en las personas que la padecen, entre estos efectos podemos enumerar algunos de ellos:

  • Problemas de concentración.
  • Depresión.
  • Vergüenza.
  • Preocupación.
  • Frustración.
  • Falta de confianza en sí mismo.
  • Menos tolerantes con los demás.
  • Incluso, volverse desconfiado y paranoico.

También nos puede causar efectos negativos físicos por ejemplo::

  • Vértigo.
  • Estrés.
  • Dolores de cabeza.
  • Problemas con la alimentación.
  • Problemas con el sueño.
  • Aumento de la tensión sanguínea.

En otras personas le pueden acarrear efectos negativos sociales como:

  • Falta de concentración.
  • Perdida de intimidad.
  • Problemas en el trabajo.
  • Problemas de comunicación con los demás.
  • Reducción de la actividad social.
  • Problemas sexuales.

Según el  estudio “Breaking the sound barrier” del  RNID, elaborado en 1999, de las personas sordas o con problemas auditivos

El 71% se sienten aislados.

El 39% evita reuniones con personas que no sean conocidas

El 91% tiene algunas dificultades para desenvolverse en lugares públicos